No solo los actores son capaces de conmover a través de la pantalla, los animales también lo hacen y con igual éxito. Pueden ser los protagonistas de cualquier género y logran realizar largometrajes que trascienden en el tiempo y se convierten en clásicos.
Por: Leonardo González
En cualquier red social, las fotos de los animalitos son un posteo asegurado de éxito. Se tenga una mascota o no, es casi imposible no caer en la ternura y el amor que provocan los “bichos”, cualesquiera sean. Nos encantan también esos videos en donde los más salvajes logran escapar de sus captores o son ayudados por personas a salir de una situación en la que peligra su vida. Pocas cosas tan fuertes como el amor hacia los animales. Por eso decidimos buscar algunos ejemplos de films en donde se puede ver esa conexión profunda entre el ser humano y los animales.Hay miles de películas sobre perros, pero nos vamos a quedar con Marley y yo (Marley & Me, 2008), basada en una historia real que cuenta la relación de una familia con su neurótica mascota. Un clásico inoxidable: Liberen a Willy (Free Willy, 1993). Un niño descubre que la orca a la que adora está por ser asesinada por los dueños del acuario en donde vive y hará todo por liberarla. Volando a casa (Fly Away Home, 1996) cuenta cómo una niña descubre gansos abandonados en un bosque y decide criarlos y enseñarles a volar para que puedan emigrar. ¿Cómo no recordar a Babe, el chanchito valiente (Babe, 1995)? Este cerdito aprendía el oficio de perro pastor para evitar convertirse en la cena de Navidad. Steven Spielberg nos regaló Caballo de guerra (War Horse, 2011), que muestra el viaje para sobrevivir de un caballo y su joven dueño a través de la Primera Guerra Mundial. Tras un naufragio en medio del océano Pacífico, un joven hindú queda a la deriva en un bote salvavidas con un tigre de bengala, con quien labrará una inesperada relación. Eso ocurre en Una aventura extraordinaria (Life of Pi, 2012).
En La leona de dos mundos (Born Free, 1966), un hombre lleva a su casa tres cachorros de león tras verse forzado a matar a su madre. Elsa es la que se convierte en la más querida, ¿pero qué pasará cuando estos animales dejen de ser cachorros? Gorilas en la niebla (Gorillas in the Mist: The Story of Dian Fossey, 1988) cuenta la historia real de Dian Fossey, que viajó a África para censar a los gorilas de montaña y terminó tratando de protegerlos, enfrentándose a las autoridades y los cazadores furtivos. Y terminamos con un gato: Las aventuras de Chatrán (Koneko Monogatari, 1986). Chatrán es un gatito que se cría junto al perrito Puske en una granja casi como hermanos. Cuando por accidente se separan, ambos intentarán todo para volver a encontrarse.
¿Ya les dieron ganas de ver –o volver a hacerlo– algunas de estas películas? No pierdan tiempo y háganlo. Nada más lindo que emocionarse hasta las lágrimas con estos hermosos seres que tocan el alma.
ADN SOBRE PELÍCULAS de ANIMALES
• Los largometrajes protagonizados por animales apelan a la empatía del espectador y su amor por ellos.
• En un rodaje normal, suelen utilizarse al menos dos ejemplares de la especie para poder reemplazarlos ante eventualidades.
• Para lograr que los animales hagan lo que requieren las escenas, los entrenadores suelen posicionarse detrás de cámaras para llamarlos o guiarlos.
• Los animales tienen su propia entrega de premios, los Pawscars Awards, en donde se honra su esfuerzo y su actuación.
