Este mes se estrena la séptima película de la saga de Misión: imposible, protagonizada por Tom Cruise. En los últimos años, el actor se posicionó como uno de los mejores exponentes de la industria.
No muchos actores llegan a la categoría de estrellas, ese lugar solo está reservado para algunos pocos. ¿Qué hay que tener para acceder a ese olimpo? Mucho talento, un tremendo carisma y, obviamente, brillo con luz propia. Esta clase de artistas, para que se entienda la diferencia con los demás, es la que logra que el público vaya al cine a ver su última obra solo porque está su nombre. Y Tom Cruise es uno de ellos.
El neoyorquino comenzó su carrera muy joven, y mucho le sirvió su aspecto físico. Pero estaba claro que no quería ser el galancito de moda y buscó demostrar que estaba hecho para otra cosa. No solo eligió buenos proyectos para trabajar que exigieran más de él, como, por ejemplo, Nacido el cuatro de julio, Ojos bien cerrados o Magnolia, sino que se dio el lujo de trabajar con directores de la talla de Paul Thomas Anderson, Oliver Stone, Steven Spielberg, Francis Ford Coppola, Tony y Ridley Scott, Martin Scorsese y Stanley Kubrick, entre otros.
También probó que puede con cualquier género, sea comedia (Jerry Maguire), musical (La era del rock), terror (Entrevista con el vampiro), suspenso (Fachada) o drama (Leones por corderos). Todo le sienta bien.
A mediados de los 90, comprendió que para tener más control de su carrera le iba a servir dar un paso más y se convirtió en productor. Su primer film fue Misión: imposible, dirigida por Brian De Palma, y que adaptaba a la pantalla grande la famosa serie de espías de la década del 60. También, vale decir, comenzó su alocada idea de hacer sus propias escenas de riesgo. Hasta este punto, Cruise nunca había hechos secuelas, pero Misión: imposible lo enamoró de tal manera que no solo hizo una, sino seis más. Y la que viene ahora parece que comienza a cerrar el círculo de su personaje favorito, porque la historia va a estar dividida en dos partes.
En Misión: imposible – Sentencia mortal Parte 1, Ethan Hunt y su equipo se embarcan en su misión más peligrosa hasta el momento: tienen que rastrear una nueva y poderosa arma que, si cae en las manos equivocadas, es una amenaza para toda la humanidad. Con la lucha por el control del futuro y el destino del mundo en juego, comienza una carrera mortal alrededor del mundo. Enfrentado a un enemigo misterioso y todopoderoso, y con las fuerzas oscuras del pasado de Ethan acercándose, el agente se verá obligado a considerar que nada puede importar más que su misión, ni siquiera las vidas de sus seres queridos.
Tom Cruise es sinónimo de cine. Pocos artistas le ponen tanta pasión, dedicación y esfuerzo a lo que hacen con el solo objetivo de entretener al público. ¿Y cuál es su recompensa? El aplauso, el reconocimiento y el cariño de la gente. Y todo merecidamente ganado.
