“Pero sarna con gusto no pica”, suelta entre risas Amaia Montero al revisar sus diez años como solista. “Desde mi primer disco veo una evolución. Un poco es la que te da la edad, porque no escribes igual a los 20 que a los 30”, le dice a Convivimos durante su visita al país. Su carrera suma 20 años contando el tiempo con la banda La Oreja de Van Gogh. “Es difícil hacer un camino tan largo, el balance es positivo. En solitario lo bueno y lo malo recaen sobre uno, quizás en un grupo estás más protegida. No me arrepiento de nada y me alegro de las decisiones. La música es mi pasión y siempre he sido de arriesgarme, de vivir lo que siento”.
Está de gira por la Argentina con las canciones de Nacidos para creer, su último trabajo y al que define como un “striptease emocional”. “Siempre me he expuesto, por eso este disco es más que un desnudo, luego de la crisis de los 40 he podido quitarme ciertos miedos”, confiesa. En el escenario no percibe esa exposición, más bien se detiene a observar las caras de su público. “Siento que se identifican con los temas, sobre todo con los de este álbum, que es muy autodidáctico por las conclusiones que he sacado en las letras”.
Confiesa que al componer es un espíritu libre: “Cuando empiezas a escribir, tienes que hacer lo que te sale, no puedes esperar conformar al millón, siempre habrá alguien a quien no le guste”.
- ¿El último show que viste?
Bob Dylan en Madrid.
- ¿Uno que recomiendes?
Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina.
Amaia Montero
La cantautora vasca sigue de gira por la Argentina con su Nacidos para Creer Tour.
8 de junio, en Teatro Coliseo, Buenos Aires; 13, en Stadium Arena Maipú, Mendoza; 15, en Teatro Quality, Córdoba; 22, en El Playón de Hangar, Corrientes; y 23, en Teatro Mercedes Sosa, Tucumán.
